7 dic 2007

Perdidos


Serie estadounidense producida por ABC Studios y Bad Robot Productions, que narra la historia de un grupo de supervivientes que se estrella en una isla en el océano Pacífico. Los protagonistas se enfrentan al reto de sobrevivir hasta que alguien les rescate, pero pronto se dan cuenta de que no va a ser tan fácil, el misterio rodea a la isla, el piloto les dice que es imposible el rescate porque habían estado dos horas volando con la radio rota y con un rumbo erróneo, justo antes de morir a manos de un monstruo sobrenatural. Aparte de eso, por si fuera poco, no están solos, antes de que ellos se precipitaran desde el cielo ya había pobladores en la isla, y no son pacíficos.

Estas son las líneas generales de esta gran producción rodada en las islas de Hawai, con un reparto excelente, de unos quince protagonistas y con unos guiones perfectamente construidos que van desvelando poco a poco el misterio de la isla. Cada capítulo cuenta la historia de alguno de los personajes mediante el recurso de “flashbacks” que se entroncan perfectamente con la trama principal que ocurre en la isla. Lo que se descubre de los personajes, historias turbulentas y nada convencionales, es fundamental para resolver cada capítulo, en los que pasado y presente se mezclan para crear una sola historia y donde nada es lo que parece.

Los comienzos de Perdidos

El presidente de ABC, Lloyd Braun, presentó la idea original por primera vez en una reunión con todos los creativos de la cadena en California, más tarde sería despedido por diversos motivos, entre ellos, los 14 millones de dólares que costó el “piloto” de “Perdidos”, el más caro de la historia hasta ese momento.

Lloyd dijo ¿por qué no hacemos una serie de supervivientes en una isla desierta?, pero la idea pasó desapercibida, para todos excepto para Tom Sherman, del área de dramáticos y presidente de Bad Robot Television, a quien le pareció genial y empezó a trabajar en un guión que al final no terminó de cuajar, en palabras de Lloyd Braun, era pura bazofia. Atascados recurrieron a J.J Abrams, que en ese momento se encontraba inmerso en el rodaje de “Alias” y en otros proyectos. En un principio no le interesó mucho, pero pasaron unos días y llamó para comentarles que por "desgracia" tenía algunas ideas, ¿y si la isla no fuera sólo una isla, y si fuera un personaje en sí mismo? ¿Y si la isla fuera un lugar mitológico? Entonces dijo que se encargaría del proyecto pero que necesitaba un guionista.

La cadena pensó en Damon Lindelof, desconocido hasta el momento, estuvo encantado de trabajar con J.J Abrams y ya en la primera reunión todo funcionó perfectamente, Damon y J.J tenían las mismas ideas sobre el misterio que debía rodear la isla y eso se convertiría en una presión externa a los personajes que haría que la serie funcionara. Al final, crearon un borrador de 23 páginas en cinco días y se lo presentaron a Lloyd Braun que, entusiasmado, dio luz verde al proyecto.